20/06/201125/09/2011
Picasso crea
A través de la cámara de David Douglas Duncan
“Las jóvenes generaciones quizá piensan que Picasso era misterioso. No lo era en absoluto. Para mí, en cambio, existe un misterio: le he fotografiado unas veinticinco mil veces. En cada ocasión, parecía completamente normal, semejante a cualquier persona, excepto por los ojos. Se reía, estaba siempre muy atento a lo que decías, se interesaba por ti. Pero en mis encuentros con él nunca llegué a saber en qué pensaba”. A pesar de lo que señala el propio fotógrafo en esta cita, las imágenes tomadas por David Douglas Duncan están consideradas como una de las mejores tentativas de exploración dirigidas a comprender a Pablo Picasso y su obra.
Nacido en 1916 en Kansas City (Estados Unidos), Duncan estudió arqueología, zoología marina y español, idioma que años más tarde le serviría para comunicarse con Picasso. En la Segunda Guerra Mundial fue fotógrafo en los frentes del Pacífico Sur. Durante este tiempo, revistas como National Geographic le compraron diversos artículos, lo que le animó a continuar con la fotografía tras el fin del conflicto. Así, entre 1946 y 1956 fue fotoperiodista para la conocida revista Life, para la que inmortalizó acontecimientos históricos como el final de la ocupación británica de India, el boom del petróleo en Arabia Saudí, la guerra civil de Grecia y, en particular, las guerras de Corea y Vietnam.
En 1971, se convirtió en el primer fotógrafo en exponer en solitario en Whitney Museum of American Art de Nueva York, tras haber recibido en 1967 la medalla de oro Robert Capa, premio que otorga el Overseas Press Club. Fue precisamente Capa el que había animado a Duncan a conocer a Pablo Picasso. “Creo que os convertiréis en buenos amigos”, le había dicho. Por ello, en 1956, en uno de sus viajes a Europa, probó suerte, se dirigió a Cannes y se presentó en la casa del artista. Con un anillo grabado con los nombres ‘PICASSO – DUNCAN’ como regalo de bienvenida, el fotoperiodista fue recibido por el artista mientras éste se bañaba. Fue cuando le tomó su célebre primer retrato –en exposición— y surgió una amistad que duró hasta la muerte del andaluz en 1973 y que propició miles de fotografías y varios libros que introducen al lector en un espacio reservado para el trabajo, la familia y los amigos.
Una ventana a la intimidad del artista
La exposición que el Museo Picasso Málaga le dedicó mostró cerca de 115 fotografías tomadas entre 1956 y 1961, que dialogaron con las 77 obras de Pablo Picasso reunidas para la ocasión. Entre estas últimas, retratos al óleo de su mujer, Jacqueline, espectaculares esculturas como La mona y su cría (1951) y Mujer con llave (1954-1957) –por primera vez en el MPM—, dibujos y cerámicas, que el espectador pudo reconocer fácilmente en las instantáneas. El conjunto puso una vez más de relieve la diversidad de estilos y técnicas de un artista que sigue fascinando hoy como en su día apasionó al objetivo incisivo de Duncan.
Esta puesta en perspectiva permitió también comprender sus procesos creativos, así como el contexto en el que surgía la inspiración. Amigos, familiares, visitas y, sobre todo, obras de arte –multitud de ellas— aparecen en las imágenes de Duncan, que da testimonio desde el otro lado de la cámara del meticuloso trabajo y de la mirada múltiple a la que el artista sometía su propia obra. En este sentido, Claude Ruiz-Picasso, hijo del artista, asegura en el libro editado con motivo de la exposición: “Lo que se ve es real. Es verdad. Era todo sencillamente natural, su presencia también. Ni se hacían preguntas ni había tabúes”.
Picasso crea. A través de la cámara de David Douglas Duncan se completó con el testimonio del propio Duncan, recogido en un documental de cerca de 20 minutos que fue grabado en abril de 2011 expresamente para ser mostrado en la exposición. En la cinta, el fotoperiodista relata su experiencia con Pablo Picasso, recordando algunas de sus conversaciones, evocando el ambiente de sus residencias, así como la confianza y la libertad con la que se le permitió hacer su trabajo.
La exposición fue posible gracias a la colaboración de diversas colecciones públicas y privadas tanto españolas como internacionales. Tras su paso por el Museo Picasso Málaga, se exhibió en el Kunstmuseum Pablo Picasso Münster de Alemania y en La Piscine. Musée d’Art et d’Industrie André Diligent de Roubaix en Francia.
## Publicación y actividades relacionadas
Picasso crea. A través de la cámara de David Douglas Duncan fue asimismo el título de la publicación que acompañó a la exposición. Ésta cuenta con ensayos de las dos comisarias, Stephanie Ansari y Tatyana Franck; de Claude Ruiz-Picasso, hijo del artista; de Harald Theil, estudioso de la cerámica picassiana; Marie Alice Harper, de la Universidad de Texas; y de Markus Müller, director del Kunstmuseum Pablo Picasso Münster. En la doble edición, en español e inglés, están reproducidas las obras que fueron expuestas. Este volumen está disponible en la Librería MPM.
La exposición fue la protagonista de las Charlas en el Museo, las visitas guiadas que cada jueves a las 18.00 horas tienen lugar en el MPM. Asimismo, bajo el título de El estudio del artista, el MPM organizó un ciclo de talleres de verano para niños, en los que los pequeños visitaron la exposición para conocer de cerca la obra de Pablo Picasso y David Douglas Duncan. Tras la visita, trabajaron en la zona de talleres para convertirla en el estudio de los nuevos creadores, llenándola de pinturas, cerámicas y esculturas hechas por ellos.