Pablo Picasso (1881-1973). Mujer desnuda de pie, Cadaqués o París, verano u otoño, 1910. Fundación Almine y Bernard

Mujer desnuda de pie

Verano u otoño 1910

English version

Hace 114 años, en el verano u otoño de 1910, Pablo Picasso realizó el óleo sobre lienzo Mujer desnuda de pie.

«En el verano de 1909, Picasso volvió a utilizar el facetado continuo de Tres mujeres, aplicándolo a numerosos retratos de su compañera Fernande Olivier. En aquel paréntesis de varios meses había estado experimentando con toda una serie de lenguajes formales, entre ellos el de la figura ‘desollada’ de la Bañista de 1909-1909. La producción de Braque mostraba, por el contrario, una evolución más congruente: dedicado básicamente a la naturaleza muerta y el paisaje, Braque empleaba el facetado para conseguir una integración cada vez mayor de la superficie pictórica.

Pablo Picasso (1881-1973). Tres mujeres, París, 1908. Museo Estatal del Ermitage, San Petersburgo © Foto Scala, Florencia © Sucesión Pablo Picasso, VEGAP, Madrid, 2024 y Pablo Picasso (1881-1973). Bañista, invierno, 1908-1909. Museum of Modern Art, Nueva York. Legado de Louise Reinhardt Smith © 2024. Archivo digital, The Museum of Modern Art, Nueva York/Scala, Florencia © Sucesión Pablo Picasso, VEGAP, Madrid, 2024

En 1910, el diálogo entre los dos artistas se intensificó, y juntos transformaron radicalmente el cubismo. Daniel-Henry Kahnweiler, que, aparte de ser el marchante de ambos, era un crítico perspicaz del cubismo, situaría ‘el avance decisivo que emancipó al cubismo de lo que hasta entonces era el lenguaje de la pintura’ en la producción de Picasso durante el verano de 1910. Fue entonces, según Kahnweiler, cuando Picasso ‘rompió con la forma cerrada’ (Daniel-Henry Kahnweiler. El camino hacia el cubismo. Barcelona: Acantilado, 2013, pp. 46-47). En Tres mujeres, y en sus pinturas del verano de 1909, las facetas forman una piel continua que envuelve y unifica las figuras. En obras de 1910 como Desnudo de mujer de pie (Madmoiselle Léonie), Picasso taladra esa piel y permite que planos discontinuos se muevan libremente por un espacio sombrío que recuerda a Rembrandt y Velázquez. El cuerpo deja de ser masa para convertirse en volumen hueco, interpenetrado con el vacío que lo rodea. Parece haber sido Braque quien introdujo bandas verticales y horizontales alineadas con los bordes del plano pictórico, que estructuraban el espacio y proporcionaban un andamiaje al que amarrar los planos flotantes de Picasso.

Pablo Picasso (1881-1973). Desnudo de mujer de pie (Mademoiselle Léonie), París, verano-otoño 1910. Fundación Almine y Bernard Ruiz-Picasso, Madrid © FABA Foto: Hugard & Vanoverschelde Photography © Sucesión Pablo Picasso, VEGAP, Madrid, 2024

El trabajo de Picasso en el verano y otoño de 1910 está dominado por tres series principales de dibujos y pinturas. Una representa una figura de tres cuartos que sostiene una guitarra, o una mandolina, o un remo. Una segunda serie, completada como la primera en Cadaqués, muestra un desnudo de cuerpo entero y erguido. En esta exposición se encuentra un pequeño boceto al óleo para esa figura [Mujer desnuda de pie, verano u otoño 1910]. La versión final está en la National Gallery of Art de Washington [Mujer desnuda, 1910]; a pesar de ser casi de tamaño natural, bordea la abstracción y solo es posible ‘leerla’ con ayuda del boceto al óleo y dibujos conexos.

Pablo Picasso. Mujer desnuda, 1910. National Gallery of Art, Washington D. C., Alisa Mellon Bruce Fund © Cortesía de National Gallery of Art, Washington © Sucesión Pablo Picasso, VEGAP, Madrid, 2024

La tercera serie surgió de la idea de grabar cuatro aguafuertes para ilustrar Saint Matorel, una novela corta de Max Jacob, y que Daniel-Henry Kahnweiler, el marchante de Picasso, la publicara como libro de arte. Picasso empezó a trabajar en el proyecto en julio de 1910, estando en Cadaqués, y prosiguió tras su regreso a París a finales de agosto o primeros de septiembre. Los temas de las planchas eran una naturaleza muerta sobre una mesa, un convento y dos imágenes de mademoiselle Léonie, personaje del relato. Una de estas, un desnudo de pie, se acabó en Cadaqués; la segunda, que mostraba a Léonie recostada en una chaise longue, se terminó algunos meses más tarde en París».

Texto: KARMEL, Pepe (dir.). Diálogos con Picasso. Colección 2020-2023. [Cat. exp. Museo Picasso Málaga, 2020]. Málaga: Museo Picasso Málaga, 2020, p. 104.

Otros artículos de Universo Picasso